El encuentro fue una vez más similar a los anteriores, miradas prolongadas, sonrisas turbadoras y flirteo sin paliativos. Aunque dominaba el protocolo de actuación lo cierto es que me facilitaba el camino con su actitud....
Volvió a hacerme sentir como la única mujer en el mundo capaz de atraer su atención.
Y ocurrieron una serie de hechos de una potencia y temperatura muy elevadas.....en un espacio de tiempo sumamente reducido que un segundo me pareció una eternidad...."
No hay comentarios :
Publicar un comentario